26 de noviembre de 2009

Dibujando en el vaho de un cristal

El otro día, dentro del autobús, un niño dibujaba en el vaho que cubría el cristal de la ventana. Escribía una palabra y dibujaba algo que para él debía tener su sentido. De inmediato me viene a la mente La última noche (2002), el film de Spike Lee en el que Edward Norton debe entrar en prisión. Hacia el final, el coche de Norton se para frente a un autobús, en el que un niño escribe su nombre en la ventana. Norton le devuelve el saludo y hace lo propio en el cristal de su coche. Eso sí que es comunicación universal. A veces me gustaría poder seguir escribiendo en el vaho de ese autobús o de ese tren. Sin que me importasen los 80 ojos que me observasen o las 40 bocas que me juzgasen. Prometo redimirme y volver a trazar esos graffitis efímeros en el cristal humedecido de tu autobús. Mientras tanto, vean el film de Spike Lee o vayan directamente a pintar en la ventana.